La
iluminación es considerada como uno de los componentes necesarios para
cualquier tipo de acuario. Si los invertebrados y los arrecifes de coral no
reciben suficiente luz para realizar la fotosíntesis, entonces su supervivencia
puede llegar a estar en peligro. Para lograr una mejor iluminación en un
acuario, se debe seguir una regla básica, tratando de proporcionar entre 1 y 2
vatios de iluminación por cada galón en acuarios de peces y de 4 a 8 vatios por
galón para acuarios de arrecife. Para acuarios de agua dulce y acuarios
plantados, se recomienda un sistema de iluminación de 24 horas. Existen
diferentes tipos de sistemas de ese tipo en el mercado, seleccione el que más
se adapte a sus necesidades.
Otro factor por el
que la iluminación es tan importante en estos ambientes, se debe a la necesidad
que tienen algunos peces de alimentarse a base de algas, las cuales solo
prosperan si reciben suficiente luz.
Por lo tanto, el
acuario debe contar con una fuerte iluminación artificial.
Los tanques más
simples cuentan con una cubierta metálica o de plástico diseñada para sostener
una serie de tubos fluorescentes. Asegúrese de que la cubierta se pueda quitar
fácilmente para el acceso y que sea a prueba de agua. Si la cubierta es de
metal, píntela con tres capas de barniz de poliuretano para evitar la
corrosión.
Seguramente puedes
encontrar gran variedad de tubos fluorescentes a la venta, muchos de ellos
están especialmente formulados para el mercado de los acuarios. Esta forma de
iluminación es ideal porque los tubos fluorescentes no son demasiado caros, son
económicos, duran mucho tiempo y no se calientan. Generalmente con este tipo de
iluminación ya es suficiente, pero es posible que tengas un acuario o estanque
muy profundo o requieras un enorme
crecimiento de algas, en cuyo caso ya estos tubos no sean tan eficientes.
Recuerde que los tubos fluorescentes tienen una vida útil limitada, es posible
que tengas que reemplazar uno o dos cada 6 meses.
Para evitarse el
trabajo de preparar la iluminación de los acuarios de la forma que se ha
descrito hasta ahora, algunas personas eligen los acuarios sin cubierta. Ellos
colocan el depósito a cielo abierto y usan la iluminación decorativa, o colocan
proyectores domésticos comunes, con la luz dirigida hacia el agua para crear
algunos efectos sorprendentes con su movimiento.
Las lámparas de
mercurio son una forma de iluminación cada vez más popular para los acuarios.
Lucen como luces decorativas para el
hogar y son suspendidos sobre el depósito o montados en la pared. Son muy
caras, pero son una fuente de luz muy eficiente.
Ahora bien, las
lámparas de halogenuros metálicos sería la elección de los especialistas.
Cualquiera que haya visto un gran tanque marino iluminado por estas lámparas,
se sentiría insatisfecho al volver a la iluminación más habitual. Estas
unidades de iluminación, protegidas adecuadamente para su uso cerca del
acuario, son caras y voluminosas, y pueden no ser adecuadas para los
principiantes.
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